Puzzles matemáticos de superficies

Los acertijos, como los de este folleto, son uno de los tipos de rompecabezas a los que se enfrentan los alumnos de tercero de primaria, y han sido creados especialmente con el objetivo de desarrollar con éxito la capacidad de razonamiento. Los niños se alegran mucho más de resolver rompecabezas que de realizar problemas de cálculo y, de este modo, empiezan a enfrentarse a ellos de una manera positiva. Además, a la vez que se divierten, su sexto sentido con los números se refina y su interés por las matemáticas y la aritmética se hace más profundo. A primera vista, puede parecer que entre los acertijos también hay problemas que no se pueden resolver sin usar fracciones o decimales. Sin embargo, los alumnos de tercero de primaria, que todavia no han aprendido a realizar estas operaciones, son capaces de hacerles frente. Lo cierto es que están ideados para que en todos los casos puedan resolverse sólo mediante cálculos con números enteros. Por lo tanto, no hay que pensar que nos hará falta mucho esfuerzo para resolverlos.

Además, los acertijos no consisten únicamente en meros cálculos, también hay problemas en los que habrá que juguar con los espacios vacíos. Si logras encontrar soluciones ingeniosas podrás resolverlos sin hacer cálculos complicados con fracciones y decimales. El encanto de estos acertíjos reside precisamente en esto. Reconoce los espacios vacíos y empléalos con destreza para desarrollar un sexto sentido con los números así como una percepción multilateral.

Los rompecabezas están destinados a alumnos de primaria, que todavía tienen un cerebro muy maleable, como una tabla rasa. Entonces, sucede que cuando los adultos, que ya tienen el pensamiento fijado, intentan resolverlos, no consiguen completarlos precisamente por eso mismo, a menos que primero le den una vuelta de tuerca más al cerebro. La gran diferencia entre los rompecabezas convencionales y los presentados aquí es el seguimiento de patrones.

Los rompecabezas presentados aquí son un entrenamiento para mejorar. No se pueden resolver mediante acciones repetitivas. Hay ocasiones en las que no los podremos resolver sin haber sufrido un cambio drástico en nuestra manera de pensar. Naturalmente, como hay que darle una vuelta de tuerca más al cerebro, se consigue una estimulación cerebral.

Para resolverlos no hacen falta cálculos complicados. Los podrás resolver con los cálculos de un niño de tercero de primaria. Lo importante son el punto de vista y la agilidad mental. Cuando resuelvas los rompecabezas podrás experimentar el sentimiento de realización y la felicidad de haber completado el reto. A medida que vayas resolviendo problemas, el cerebro se estimulará de manera natural y, a medida que pase el tiempo, quizás notes que tu velocidad mental va mejorando.

Importante: En este folleto, para que no se puedan resolver los rompecabezas sin realizar cálculos, las longitudes y las áreas de las figuras no están dibujadas necesariamente de manera proporcional y precisa.

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